chusmi
Al chófer de naranjito le gustan las cosas bien hechas, y si son como él las quiere, mejor. Esa búsqueda de la perfección es una de las cosas que ha llevado a Naranjito a ser considerado Patrimonio de Interés Cultural. Gestiona desde la cabina todos los sistemas auxiliares de Naranjito y trata siempre de conducir de forma ortodoxa, aunque esto no siempre le es posible. Es reconocida su suavidad con el embrague, cualidad que permite a sus compañeros seguir bailando sobre Naranjito sin caidas entre cambios de marcha.